#84 Hay formas y formas de "engañar" (aunque los magos preferimos la palabra ilusionar).
El mago pop engaña de una manera muy básica y denostada en el mundo de la magia: el 100% de los ayudantes elegidos al azar entre el público en sus espectáculos son compinches, actores pagados para que digan y hagan lo que han acordado de antemano.
Lo sé de primera mano ya que tengo muchos amigos actores que trabajan de "publico" en sus espectáculos. Fui acompañando a uno de esos amigos y pude ver con mis ojos que TODOS los que salían al escenrio o eran elegidos para decir algo desde su sitio eran compinches.
Se aprovecha del legado de grandes magos que sí se lo han currado y hacen los mismos efectos sin compinches. Esos magos han desterrado de la cabeza de los espectadores durante muchos años la existencia de compinches: Juan Tamariz, Pepe Carroll, Jorge Blass, Luis Piedrahita, Jandro, Inés, Yunke, Alberto de Figueiredo, Miguel Gómez, Woody Aragón, Dani DaOrtiz, Miguel Ángel Gea, Arturo de Ascanio, Gabi Pareras, Román García, Juan Luis Rubiales, Mag Lari, etc.
Por no hablar de la cantidad de efectos robados a otros magos por la cara, sin siquiera pedir permiso y haciendo caso omiso a la petición de sus legítimos creadores de quitarlos del espectáculo.
Pero claro, si tienes una productora potente detrás de ti que puede permitirse invertir en publicidad, televisión, compinches, etc, tienes mucho camino recorrido.
Pocos magos profesionales verás que hablen bien de este señor (los que yo me he encontrado, directa o indirectamente comen de él).
Así que sí, los magos hacemos trucos y engañamos, pero nos valemos de la psicología, la habilidad, la estructura, el control de la atención y mil técnicas más que hacen de la magia todo un arte complejísimo. Si sustituyes todo eso por un compinche que te da lo que necesitas, se pierde todo ese arte y se reduce a una obra de teatro.
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#84 Hay formas y formas de "engañar" (aunque los magos preferimos la palabra ilusionar).
El mago pop engaña de una manera muy básica y denostada en el mundo de la magia: el 100% de los ayudantes elegidos al azar entre el público en sus espectáculos son compinches, actores pagados para que digan y hagan lo que han acordado de antemano.
Lo sé de primera mano ya que tengo muchos amigos actores que trabajan de "publico" en sus espectáculos. Fui acompañando a uno de esos amigos y pude ver con mis ojos que TODOS los que salían al escenrio o eran elegidos para decir algo desde su sitio eran compinches.
Se aprovecha del legado de grandes magos que sí se lo han currado y hacen los mismos efectos sin compinches. Esos magos han desterrado de la cabeza de los espectadores durante muchos años la existencia de compinches: Juan Tamariz, Pepe Carroll, Jorge Blass, Luis Piedrahita, Jandro, Inés, Yunke, Alberto de Figueiredo, Miguel Gómez, Woody Aragón, Dani DaOrtiz, Miguel Ángel Gea, Arturo de Ascanio, Gabi Pareras, Román García, Juan Luis Rubiales, Mag Lari, etc.
Por no hablar de la cantidad de efectos robados a otros magos por la cara, sin siquiera pedir permiso y haciendo caso omiso a la petición de sus legítimos creadores de quitarlos del espectáculo.
Pero claro, si tienes una productora potente detrás de ti que puede permitirse invertir en publicidad, televisión, compinches, etc, tienes mucho camino recorrido.
Pocos magos profesionales verás que hablen bien de este señor (los que yo me he encontrado, directa o indirectamente comen de él).
Así que sí, los magos hacemos trucos y engañamos, pero nos valemos de la psicología, la habilidad, la estructura, el control de la atención y mil técnicas más que hacen de la magia todo un arte complejísimo. Si sustituyes todo eso por un compinche que te da lo que necesitas, se pierde todo ese arte y se reduce a una obra de teatro.