Llevo tiempo pensando en escribir en este portal mi opinión referente a la deriva moralizante, dogmática y ortodoxa a la que nos lleva la política y la opinión social masiva actualmente. En los últimos tiempos he visto de todo, ejemplos paradigmáticos de la pérdida del criterio y el triunfo de la política más moralista, simplista, interesada y absurda. Hay tantos casos que en mi opinión concretar sería absurdo. Es algo endémico, sistemático.
El problema, es que me veo incapaz de concretar, pues si lo intentara acabaría escribiendo algo de extensión inaceptable en este portal. Es en mi opinión una deriva social sistemática y sistémica.
Hemos perdido el norte y la capacidad crítica en favor del moralismo más barato y la ideología más simple y acrítica. Masivamente aceptamos la mercadotecnia y sociología política sin orden, moral, ni criterio. Nos insultamos y peleamos en base a dogmas ideológicos, políticos. Y pagamos impuestos para mantener esa borrachera ideológica en forma de más entidades y políticas absurdas que no aportan nada más que un sumidero de recursos y ningún avance práctico.
Personalmente, veo diferente moral y moralismo, ética e ideología. No sé si mi primer artículo (este) funcionará, pero mi intención es propiciar un debate sensato, y mojarme en sociedad, pues es importante.