Treinta y tres millones de brasileños todavía no tienen acceso al suministro hídrico. El gobierno impulsa la privatización del sector mientras miles mueren por la pandemia.
Bolsonaro ha modificado la legislación de servicios de abastecimiento y saneamiento y las grandes corporaciones internacionales han ampliado sus mercados
Comentarios
Están disfrutando de lo votado.
¿Quién quiere agua gratis pudiendo pagarla?
Por algo los neocon se han esforzado tanto para auparle al poder.
Ya sabían lo que votaban, triste pero es así.
Y luego Santarrita.. Parece que los únicos que no lo veían venir eran los Evangelistas entusiastas que me imagino que no serán precisamente ricos
En el capitalismo la prioridad es el negocio de las grandes corporaciones, por encima de que la gente pueda beber agua.
Bolsonaro ha modificado la legislación de servicios de abastecimiento y saneamiento y las grandes corporaciones internacionales han ampliado sus mercados
Y volvería a ganar las elecciones con mayoría absoluta.
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