El director del Festival de Jazz de Vitoria, Alberto Ibarrondo, ha confesado que intentaron contratar a la cantante catalana Rosalía para la 43 edición del certamen que arranca el próximo martes pero que lo tuvieron que descartar por el alto caché de la artista. Ibarrondo, en una entrevista concedida a Efe, ha desvelado los pormenores de esta edición, en la que se mantiene la apuesta por el jazz más puro, aunque eso no quiere decir que no puedan abrirlo a músicas fronterizas...
A mí lo de artistas demostrando hipocresía y cinismo, sinceramente sigo sin entenderlo. Por ejemplo siendo ella millonaria cantar contra los millonarios.
Es como cuando va la actriz de turno, hablando de pobreza, con un vestido que le costó 30.000 €.
Me parece bien que no la lleven, ya no por el caché, que es de locos, sino porque no pega ni con cola en el contexto.
Si estuviera en el estilo de sus inicios sería apropiado y recomendable pero como se la han cargado artísticamente, comoooooo siiiieeeeempre, no tiene ningún sentido.
Comentarios
Bien, que usen ese dinero para llevar a alguien que haga Jazz.
Y qué esperaban? Qué actuara gratis?
#4 no están diciendo eso, simplemente que han tenido que rechazarla por su alto caché. En ningún caso pretendían que actuara gratis.
Festival de jazz - Rosalía
Por qué?
#9 Tra traaaa
"...con un caché que, según les dijeron, se sitúa por encima de los 100.000 euros..."
Contra el vicio de pedir... está la virtud de no dar.
A mí lo de artistas demostrando hipocresía y cinismo, sinceramente sigo sin entenderlo. Por ejemplo siendo ella millonaria cantar contra los millonarios.
Es como cuando va la actriz de turno, hablando de pobreza, con un vestido que le costó 30.000 €.
Salu2
Me parece bien que no la lleven, ya no por el caché, que es de locos, sino porque no pega ni con cola en el contexto.
Si estuviera en el estilo de sus inicios sería apropiado y recomendable pero como se la han cargado artísticamente, comoooooo siiiieeeeempre, no tiene ningún sentido.
Yo intenté contratar a Pink Floyd para las verbenas de las fiestas de mi barrio pero su caché era demasiado alto. Por pedir que no sea
Se nos va de las manos.