Un texto firmado por el cardenal español Luis Francisco Ladaria, actual prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, ordenaba en 2015 ocultar las violaciones del sacerdote Bernard Preynat, que confesó haber atacado a cuatro o cinco menores a la semana, y por lo que la justicia francesa lo condenó a prisión en 2020.
Es que era el protocolo más frecuente... ocultar y trasladar, sin expulsar ni denunciar a la justicia.
A principio de los 80, en La Salle, un fraile abusó sexualmente de un niño un curso superior al mío. En cuanto saltó el escándalo le trasladaron, según me dijo más tarde el abusado, a un país de sudamérica... seguro que allí controlan mejor a los pederastas
Lo escandaloso no es que se cometan esas atrocidades, sino que se denuncien y se investiguen... Propio de quien se ha creído impune durante demasiado tiempo.
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Es que era el protocolo más frecuente... ocultar y trasladar, sin expulsar ni denunciar a la justicia.
A principio de los 80, en La Salle, un fraile abusó sexualmente de un niño un curso superior al mío. En cuanto saltó el escándalo le trasladaron, según me dijo más tarde el abusado, a un país de sudamérica... seguro que allí controlan mejor a los pederastas
Y a esta monstruosidad la señora Ayuso lo llama errores.
Lo escandaloso no es que se cometan esas atrocidades, sino que se denuncien y se investiguen... Propio de quien se ha creído impune durante demasiado tiempo.