Croan oscuras como el tizón, ocultas entre la vegetación de una charca a un escaso kilómetro del epicentro del desastre nuclear. Son distintas al resto de sus congéneres, que lucen una piel verde vibrante. Habitan uno de los lugares más siniestros del planeta: la zona de exclusión de Chernóbil. “Nunca había visto algo así”.
Comentarios
Ni una sola foto.
#2 Claro, ¡porque son un enigma!
#2 Aquí tienes una pero solo se ven las patas
Yo si lo había visto, Matt Groening y sus series proféticas, también.
Pues si que es raro, mientras nonsea que se les ha colado una Brevicipitidae de alguna forma seria una especie nueva.