Hace 5 años | Por Danismasend a jotdown.es
Publicado hace 5 años por Danismasend a jotdown.es

En 2017, un artículo firmado por Annemarie Sorescu Marinković en la revista Balcanica, editada por el Instituto de Estudios Balcánicos de la Academia de las Artes y las Ciencias de Serbia, analizó la presencia de Elena Ceauşescu en la televisión rumana. Su conclusión era que con la exposición al público que llevó a cabo consiguió lo contrario que pretendía: fue la persona más odiada del país. Veinte años después de la caída del régimen, un 87% de rumanos todavía la despreciaban.

Comentarios

Dravot

se desarrolló toda una industria para rendirle homenajes. Todo, según Marinković, para «ocultar su abismal ignorancia y su infinita vanidad»

¿también decían que había sacado un 9 de nota media en psicología?

Shotokax

De hecho era frecuente la opinión machista de que por culpa de ella, por su influencia, él se había convertido en un déspota.

¿Qué tiene de machista opinar que un miembro de una pareja influye negativamente a otro? Es una paranoia en toda regla lo que hay con el machismo.

D

Desconfíen de las parejas que se creen modelo, bandera o símbolo político de algo, porque en cualquier momento puede surgir el engendro odioso:
"Elena al principio apareció en la propaganda con el fin de mostrar que el líder del partido, además de un patriota, era también un padre de familia. Luego ella empezó a servir para ensalzar la meritocracia de la sociedad comunista, gracias a la cual había conseguido llegar a lo más alto en su carrera científica. No hay que olvidar que era una chica de pueblo enviada por sus padres a la ciudad para conseguir trabajo en la incipiente industria. Tras la guerra, sus logros, previo paso por una universidad para miembros del partido sin estudios, a la vista estaban."