El pasado jueves, las dos colegiadas brasileñas que ahora incluye la federación de fútbol por primera vez en su historia hicieron el habitual recorrido del cuerpo arbitral. Delante de la primera pasó el árbitro del encuentro, que saludó al jeque con un choque de puños tras recibir su medalla. Cuando pasó la primera mujer, el jeque no hizo ademán de saludarla, siguiendo la regla musulmana que impide a los hombres tocar o dar la mano a mujeres que no son de su familia.
Yo estoy a favor de llevar eventos como mundiales, olimpiadas... a dictaduras y sitios así.
Creo que el intercambio de personas siempre favorece la democracia y los estereotipos que tan bien vienen a esos gobiernos.
Ahora bien, el país también debe cumplir con lo que diga la organización y no al revés.
Bastante hizo que las tiene delante en pantalón corto y sin velo y no las lapida allí mismo.
Hay que ser gilipollas para ir a un país así y esperar que te traten como en Occidente.
Comentarios
#0 Ojo duplicada: Un miembro de la familia real de Catar se negó a chocar el puño con las árbitras en la final del Mundial de Clubes
Un miembro de la familia real de Catar se negó a c...
20minutos.es#6 gracias
Esto de sacar "titulares" colocando microvídeos de Twitter, que tardas más en cerrar todos los banners y publicidad que te aparece, son muy cansinos.
Yo estoy a favor de llevar eventos como mundiales, olimpiadas... a dictaduras y sitios así.
Creo que el intercambio de personas siempre favorece la democracia y los estereotipos que tan bien vienen a esos gobiernos.
Ahora bien, el país también debe cumplir con lo que diga la organización y no al revés.
Bastante hizo que las tiene delante en pantalón corto y sin velo y no las lapida allí mismo.
Hay que ser gilipollas para ir a un país así y esperar que te traten como en Occidente.
¡¡¡Qué sorpresa!!! Esto es ridículo, la próxima noticia será que lleva turbante.
Pues no haber llevado al Mundial allí... que se sabía, joder.
#1 lo sabían de sobra. Pero el dinero en sobornos para su adjudicación lo aceptaron sin rechistar.
Que no se quejen ahora.