El auge de la ultraderecha no sólo está presente en los parlamentos europeos y en las urnas del Estado Español. Observamos un fenómeno curioso, y es que con el empuje de estas ideas reaccionarias y conservadoras, paralelamente está cobrando fuerza y poder un discurso violento, inspirado en nostalgias censuradoras y puritanas del feminismo maricastaño disfrazado de izquierdas.
Ya va siendo hora de la las feministas de verdad (las que creen en la igualdad real, en la libertad personal, en el respeto, y están contra el autoritarismo) planten cara a las neomonjas
El PP también ha llegado a decir que es el partido de los trabajadores. Cada uno ya tiene que ser capaz de discernir si el PP defiende los intereses de los trabajadores, o si lo que apoya la ultraderecha es realmente feminismo o no.
Comentarios
Ya va siendo hora de la las feministas de verdad (las que creen en la igualdad real, en la libertad personal, en el respeto, y están contra el autoritarismo) planten cara a las neomonjas
¿Feminismo violento? Eso no puede ser ...
Feministas de Podemos revientan un acto por la custodia compartida y agreden a un cámara
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youtube.com#2 "Aun así prefiero seguir pensando que estas locas ni son ni representan lo que verdaderamente es el feminismo ..."
Puede que no, pero ahí arriba están, haciendo leyes.
#1 neomonjas no suena violento, y éstas lo son. Locas violentas intolerantes, como dice #2, es más correcto.
Las feministas radicales de ahora son como las mujeres beatas con sus rosarios del franquismo
#3 o peores
El PP también ha llegado a decir que es el partido de los trabajadores. Cada uno ya tiene que ser capaz de discernir si el PP defiende los intereses de los trabajadores, o si lo que apoya la ultraderecha es realmente feminismo o no.