Hace 7 años | Por --80934-- a rokambol.com
Publicado hace 7 años por --80934-- a rokambol.com

Estupefacción y rabia son ahora mismo los dos sentimientos comunes a toda la población de osos pardos que vive en Norteamérica y que, con toda seguridad, se quedará este año sin su tradicional festín de salmones. La Policía de veintisiete estados ya ha sido desplegada en la práctica totalidad de sus ríos para comprobar que la orden dictada en los dos océanos que bañan las costas norteamericanas se cumpla sin excepción alguna y los peces no abandonen el mar para adentrarse en el interior del país.