Ayer fue un día grande para el bando nacional. El lugar sagrado donde se creía que estaba Lorca es un altar vacío. Bien merecido que lo tienen los rojos resentidos que no tienen nada mejor que hacer que ir llenando España de agujeros para ganar en las cunetas lo que no supieron ganar en el campo de batalla. ¿Que de quién es la culpa? De Gibson, naturalmente. Los herederos sentimentales de quienes ordenaron matar a Lorca ya tienen de quién mofarse.
Comentarios
Algunos de los que se mofan de este historiador, aplauden hasta con las orejas a todólogos e historietadores de la emoción que les embarga .
No me ha gustado el artículo. Empezar diciendo "el bando nacional" ,señores, la guerra civil terminó hace 70 años y la dictadura acabó hace más de 30. ¿Qué hoy hay extremistas posicionados desde la derecha, lease Losantos, Vidal...? por supuesto, no seré yo quien les defienda, ni mucho menos, que estos señores mienten más que hablan, su retórica y sus excesos están fuera de lugar, y sus ideas pertenecen, afortunadamente al pasado, por supuesto. Pero a las alturas que estamos seguir empleando Bando Nacional y Rojos, es un error, un gravísimo error, y más si se hace desde la izquierda.
Ha costado muchos años que en España se pueda hablar unicamente de CIUDADANOS, con distintas ideas, credos e ideológias, ciudadanos de derechas e izquierdas, pero afortunadamente no bando nacional y rojos, eso ya hace mucho tiempo que lo dejamos atras, no lo resucitemos, y muchos menos la izquieda, por favor, costo mucho enterrarlo.
#2 la guerra civil terminó hace 70 años y la dictadura acabó hace más de 30
De acuerdo, pero actualmente hay políticos, pertenecientes a partidos votados por millones de personas, que dicen que el franquismo fue un periodo de extraordinaria placidez, cuando fue una dictadura fascista y sanguinaria. Desde este punto de vista, no ha acabado la dictadura. Yo conozco gente que aún cree que le debemos mucho al asesino Franco porque nadie le ha dicho la verdad. El problema es que durante mucho tiempo lo único que se podía decir eran las mentiras del régimen y, curiosamente, hantenido que venir personas extranjeras como Gibson para sacar a la gente del error.
Vaya manera descarada de ponerse la venda antes de la herida.