Hace 13 años | Por joanrufe a diariorc.com
Publicado hace 13 años por joanrufe a diariorc.com

En España, hoy en día, los trabajadores se endeudan con los grandes (y no tan grandes) bancos a cambio del sudor de su frente para pagar una hipoteca durante el resto de su vida. Hasta hace poco, ha bastado con llevar simplemente una nómina. Tras estampar la firma ante notario, el ilusionado infeliz se compromete a devolver el dinero recibido más los intereses, respondiendo con su trabajo, aunque en un momento determinado no pueda hacer frente al pago y devuelva el inmueble... (Continua en el articulo)