Roberto Colom, catedrático de psicología de la UAM: "Concuerdo con Michael Brooks cuando demuestra, en su excelente libro ‘Radicales libres’ (The Secret Anarchy of Science), que se debe liberar a los científicos para investigar. Ahí reside el avance en la investigación y los resultados de los que nos beneficiamos los humanos. Controlar al científico es una estupidez y un suicidio intelectual. La sociedad confía en ellos, pero a algunos ‘intelectuales’ y ‘representantes sociales’ les fascina controlar, quizá porque no saben hacer otra cosa"
Comentarios
Un científico, el espíritu intelectual de un científico, se da por propia convicción a la humanidad y de ahí su valor y gloria y, por tanto, su carácter indómito hacia todo. NO tiene más amo que su razón. Hace lo que tiene que hacer honestamente.