Para que la burbuja no les estallara en la cara a los bancos, el Gobierno aprobó en febrero una reforma financiera. Tres meses después, ha tenido que aprobar otra todavía más exigente. La idea es simple: el mercado inmobiliario terminará petando. Y los bancos, o están bien preparados para ese momento, o se hundirán.

Comentarios

D

Hay bancos que han dado más hipotecas y no están en una situación crítica como la de Bankia. No cuela eso de los "activos tóxicos". Hay una gestión penosa y mucho latrocinio patrocinado por los de siempre.