Hace unos días me fijé en la peculiar forma que tienen de utilizar las papeleras habilitadas para el reciclaje en la estación de tren de Vitoria. Inmediatamente me vino a la cabeza esta mierda.
Este tipo de papeleas recicladoras formaban unas colas de viajeros perplejos y confundidos en los accesos a las estaciones y al final se decidió que los viajeros no deben pensar en reciclar, jugando al pito-pito-colorito para saber a dónde tendrán que arrojar sus inmundicias, sino en mantener el acceso libre. Este nuevo sistema más ágil de no reciclar no impide los tapones causados por viajeros que nada más llegar a la puerta de acceso encienden su cigarrillo o se ponen a charlar con el movil formando igualmente pelotones de gente que intenta salir o entrar infructuosamente.
Comentarios
Lo he puesto en categoría humor, pero sinceramente lo considero mas trágicomedia que otra cosa.
Este tipo de papeleas recicladoras formaban unas colas de viajeros perplejos y confundidos en los accesos a las estaciones y al final se decidió que los viajeros no deben pensar en reciclar, jugando al pito-pito-colorito para saber a dónde tendrán que arrojar sus inmundicias, sino en mantener el acceso libre. Este nuevo sistema más ágil de no reciclar no impide los tapones causados por viajeros que nada más llegar a la puerta de acceso encienden su cigarrillo o se ponen a charlar con el movil formando igualmente pelotones de gente que intenta salir o entrar infructuosamente.