Hace 13 años | Por nahi a 20minutos.es
Publicado hace 13 años por nahi a 20minutos.es

La mayoría de los españoles trabajamos en turno partido. Un 42,1%, según el Centro de Investigaciones Sociológicas. Nuestro horario no nos disgusta, al contrario -un 74,8% estamos muy satisfechos con él-, pero casi siempre alargamos la jornada más de lo necesario. El inconveniente es que el esfuerzo no nos cunde: dedicamos 38,2 horas a la semana – 232 horas al año más que nuestros vecinos europeos-, a nuestra ocupación laboral, según Eurostat, y contamos con una de las productividades más bajas de Europa. Tenemos un problema.

Comentarios

eltiofilo

En primer lugar mezclar los términos de productividad con el horario puede llevar a confusión pues hay que tener en cuenta el valor añadido de los productos y servicios. Hay cierto consenso en que las actividades que han sostenido la economía patria estos años eran de bajo valor añadido. Por lo tanto, la productividad a nivel total puede que sea más baja que otros países de la UE, USA y demás. Pero si bajamos a nivel sectorial, la productividad de una empresa industrial en España porque ejemplo no tiene mucho que envidiar a la de los mejores países del mundo.

Respecto a la racionalización de horarios, que es de lo que habla el artículo es que con ese nombre cualquiera se niega. Pero aquí en ocasiones podemos disfrutar del carácter caciquil de mucho empresario-autónomo. Además es muy común que la gente se enorgullezca de trabajar 15 horas. En la mayoría del mundo desarrollado estar 15 horas para hacer un trabajo suele ser signo de incompetencia. Aquí se premia.