En el año 2009, y gracias a la aprobación por parte del Congreso de la iniciativa del PSOE, los videojuegos fueron reconocidos como parte de la industria cultural de España. Estuvieron a punto de salir de ahí para entrar en el Plan Nacional de Drogas en el año 2011 cuando a Rubalcaba y a sus colegas les dio demasiado el sol en la cabeza, pero por suerte rectificaron a tiempo y los videojuegos se quedaron donde debían estar: en cultura.
Comentarios
Argh, estaba meneándola...
faltan juegos sobre la corrupción en spanistang , harian un papel formidable.
Desde la barrera qué bien se gobierna.
porque sabemos que son unos políticos intachables, sino diría que están buscando votos por cualquier sitio...