Representantes de aproximadamente cien países comenzarán a debatir este lunes en Ginebra un protocolo que podría modificar lo previsto en el tratado contra las municiones de racimo y que paradójicamente es apoyado por los mayores productores de estas polémicas armas mientras es criticado por los activistas internacionales.
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¿Un titular entre interrogaciones es como NO tener huevos a hacer una afirmación directa pa uno no mojarse por si acaso?