Hace 16 años | Por mc_pollofrito a blogs.ya.com
Publicado hace 16 años por mc_pollofrito a blogs.ya.com

“Fue horrible. Los gonyi-pa (guardias) se ensañaron con una crueldad inimaginable. Me obligaron a tumbarme sobre la mesa y, mientras uno me abría las piernas, otro me metió la porra eléctrica por la vagina". Así describe Kinsom, una joven monja tibetana, las torturas sufridas durante sus tres años de encierro en la cárcel de Gutsa. La invasión china del Tibet está acompañada de política de genocidio sistemático, nadie escapa a las medidas de control de la natalidad. Los médicos chinos tienen incentivos para realizar el mayor número abortos.

Comentarios

D

Muy bueno el libro.