Hace 12 años | Por SrHuevo a elpais.com
Publicado hace 12 años por SrHuevo a elpais.com

El cerrajero se acuclilla ante la puerta. Con ayuda de una linterna introduce una fina vara de metal por la cerradura y en apenas un minuto logra abrir la puerta, la letra A de la tercera planta de un edificio del barrio de Vallecas.

Comentarios

D

"Entonces ganaban 700 y 1.100 euros cada uno, en la obra y cuidando a ancianos. El piso se tasó en 268.000 euros. La letra al principio era de 800 euros. Enseguida se puso en 1.200. Cuando dejaron de pagar, hace dos años, había subido a 1.700 euros."

Ese es el problema, con esos salarios, como les engañaron o se engañaron de que podían permitirse un piso de ese valor. Incoscientes ellos y los que les aceptaron la hipoteca.