De vez en cuando suelo toparme con artículos y entradas que apuestan categóricamente sobre qué se llevará en las nuevas tecnologías dentro de algunos años. No seré yo quien ponga en duda la capacidad de “vislumbrar” la nueva llegada de dispositivos revolucionarios ni de avances en la ciencia, pero me gustaría hacer un análisis basado no sólo en percepciones sino en estadísticas y en datos que he leído recientemente.