Publicado hace 10 años por daniel.vinoles.zunino a web-salud.blogspot.com.es

Una reciente investigación de la Universidad de Uppsala (Suecia), muestra que el consumo de grasas saturadas estimula la acumulación de más grasa abdominal y la generación de menos masa muscular en nuestro cuerpo, que si consumiéramos grasas poliinsaturadas.

Comentarios

auroraboreal

Creo que la población general aún no es consciente de la importante relación que tiene la grasa abdominal y las enferemdades del corazón. La grasa abdominal no es simplemente una reserva de energía, sino que se comporta como un órgano endocrino secretor de hormonas con un papel muy importante en la génesis del síndrome metabólico y en el aumento del riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.
De hecho, ya hace tiempo que en las consultas médicas se mide el perímetro abdominal como indicador de enfermedad cardiovascular más fiable que el IMC (índice de masa corporal).

http://www.fundaciondelcorazon.com/prensa/notas-de-prensa/2264-medida-perimetro-abdominal-es-indicador-enfermedad-cardiovascular-mas-fiable-imc-.html

Es muy interesante conocer la estrecha relación entre la cantidad de grasa abdominal (y no otras) y los factores de riesgo que definen el síndrome metabólico:
http://www.revespcardiol.org/es/sindrome-metabolico-concepto-fisiopatologia/articulo/13083442/

Sabiendo todo esto, a mí me parece muy importante conocer el papel que juegan algunos nutrientes (como las grasas saturadas de la dieta) en la acumulación de grasa en la zona del abdomen y si hay cambios fáciles que se pueden hacer en la dieta para disminuir el riesgo de que se acumule tejido adiposo en esta zona.

D

#1 en este tipo de estudios más vale ser escépticos. Por ejemplo no hace mucho se podía leer algo que viene a ser prácticamente lo contrario http://www.abc.es/sociedad/20131024/abci-fin-guerra-grasas-saturadas-201310231931.html
Es la misma historia que escuchamos sobre los huevos. Ahora dicen que uno al día no es perjudicial... o la cerveza que un día es buena y al siguiente... sigue estando buena
Yo creo que la postura más sabia es comer equilibrado, variado y sin excesos. El resto... hay estudios para todos los gustos.

auroraboreal

#2 el escepticismo es necesario en todos los estudios, estoy de acuerdo contigo, pero el estudio que citas no va en contra de la conclusión que han sacado en este nuevo estudio, sino que pueden ser complementarios:

En el que citas, más que decir que son buenas per se las carnes rojas, dice que son peores los azúcares y el cardiólogo afirma algo que es muy cierto: que los productos lights, bajos en grasa incrementan paradójicamente el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, por el alto contenido en azúcares que llevan

(de hecho, su trabajo se titula: "las frasas saturadas no es el principal problema" (no se titula: las grasas saturadas no son ningún problema. Es bastante diferente
http://www.bmj.com/content/347/bmj.f6340

De ahí todas las campañas actuales para intentar que la población disminuya el consumo de azúcares y relajarse un poquito en cuanto al consumo de grasas.

En tu artículo también hablan de las grasas más perjudiciales, que son las presentes en los alimentos muy procesados (y que son las mismas de las que habla el artículo sueco ) .

Él quiere, como hoy la mayoría que saben algo de nutrición, que se disminuya el consumo de azúcares añadidos a los productos alimentarios. Pero no quiere echar por tierra ciertos hábitos saludables como los que conlleva una buena dieta mediterránea ni que nos empecemos a atiborrar a chuletones. Solo quiere que sepas que un chuletón de calidad de vez en cuando es menos dañino que varios refrescos azucarados al día (cosa que consume mucha gente que, sin embargo, busca todos los productos bajos en grasas prosibles).

Por eso comenta precisamente que adoptar una dieta mediteránea con aceite de oliva, nueces, aceite de pescado, frutas y verduras después de un ataque cardiaco es casi tres veces más efectivo para reducir la mortalidad que tomar una pastilla para el colesterol (las famosas estatinas). Y esas grasas que recomienda ese cardiólogo son las mismas que recomienda el estudio sueco:

Adopting a Mediterranean diet - olive oil, nuts, oily fish, plenty of fruit and vegetables and a moderate amount of red wine - after a heart attack is almost three times as powerful in reducing mortality as taking a statin, writes Dr Malhotra.
http://www.bbc.com/news/health-24625808


El estudio sueco se limita a explicar algo que no estaba explicado, que es el porqué estas grasas aumentan la obesidad abdominal (que hoy se sabe a ciencia cierta que está íntimamente relacionada con el desarrollo del síndrome metabólico y, por tanto, de más riesgo de padecer una enfermedad cardíaca).

Y también el mismo estudio parece demostrar que los ácidos grasos poliinsaturados hacen que las grasas se distribuyan en el cuerpo de forma más favorable (en otros lugares diferentes al peligroso, que es el abdomen).
No hablan para nada de los azúcares que es lo que le preocupa más a ese cardiólogo en el estudio concreto que ha publicado (y seguro a quienes han hecho el estudio sueco también les preocupan los azúcares, pero el estudio sueco está diseñado para esclarecer las diferencias en los depósitos de grasa si tomas uno u otro tipo de grasa)
Y es el primer estudio que demuestra esto, independientemente de que lo otro --lo de los azúcares ya esté demostrado--.

D

#3 excelente comentario. Digno de entrada en blog. Nunca me preocupé demasiado por la vida sana hasta que cumplí los 30 ( todavía estoy asumiéndolo ) y en el último año, comiendo algo mejor y habiendo dejado de fumar siento el beneficio en el día a día. Cuando empecé con el gimnasio apenas trotaba 10 minutos seguidos. Ahora corro más de media hora sin parar y simplemente paro no por cansancio sino porque hasta ahí llega mi rutina en la cinta. Luego el resto de los ejercicios. Cuidarse no es caro y vale la pena. La comida sana también sale barata. Algo tan sencillo como unos grelos cocidos con patatas cocidas (se puede hervir con algo de carne también) y un chorrito de aceite es algo que sale muy baratito y a veces apetece un montón.