[...] Sólo basta con mirar al chico de arriba, que está a medias de pedir a Mario que salte por encima de un túnel con un simple movimiento de ojos. Por supuesto, hemos visto antes interfaces controladas con la vista, pero hay algo -digamos... inspiración- tal de ser capaz de controlar tus títulos favoritos de la NES con tu propio rostro.