No hay dudas de que en momentos de crisis, a veces sin darnos cuenta, comenzamos a desarrollar una mayor responsabilidad social. La educación que les demos ahora a nuestros hijos también debe incluir nuevas lecciones de responsabilidad. Un niño debe aprender desde pequeño que compartir con los demás no es solo un acto de generosidad, sino también algo divertido y que da satisfacción y alegría.
"Con el pan, como hermanos; con el dinero, como gitanos", dice mi padre. Esto va a sonar muy feo y todo lo que se quiera, pero por lo que estoy viendo en el colegio de mi sobrina, al que voy muy a menudo a traerla y llevarla, o todos los niños son unos egoístas, o ningún padre educa en la generosidad, sino en la rapiña. No hace mucho, mi sobrina salió llorando del colegio porque una niña le había pedido que le diera un cromo repetido de Wall-e que yo le había regalado; mi sobrina se negó y sin más, la otra niña cogió y se lo rompió. Yo no me meto en peleas de niños de preescolar, sería injusto y abusivo... pero hice algo totalmente antipedagógico y moralmente reprobable, pero muy satisfactorio para mi sobrina y para mí misma, indignada ante el abuso de su compañera... le pedí que me dijera dónde estaba la tal niña, me la señaló y nos acercamos. No, no la dije NADA, nada en absoluto. Simplemente saqué del bolsillo los sobres de cromos que le tocaba abrir ése día (compré la colección y la hacemos juntas, unos cuantos sobres cada día) y los abrimos allí, delante de la otra niña. Mi sobrina se puso muy contenta al encontrar de nuevo repetido, el cromo de marras, y lo levantó para que la otra lo viera, sin decir nada. Lógicamente, la otra se mosqueó, pero no se le ocurrió abrir la boca, consciente de que yo sabía lo sucedido...
Antes de eso, cuando mi sobrina tenía una chuchería, lo que fuese, le gustaba llevarla al colegio y jugar con ella con sus compañeros (un cochecito, un cubo de rubik...). Desde aquéllo, no quiere llevar nada, porque "los otros lo rompen". Y sinceramente, creo que hace bien. Como compartir, ya comparte con su hermana y su familia, que es con quien debe. El que da lo que tiene... se queda sin nada.
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"Con el pan, como hermanos; con el dinero, como gitanos", dice mi padre. Esto va a sonar muy feo y todo lo que se quiera, pero por lo que estoy viendo en el colegio de mi sobrina, al que voy muy a menudo a traerla y llevarla, o todos los niños son unos egoístas, o ningún padre educa en la generosidad, sino en la rapiña. No hace mucho, mi sobrina salió llorando del colegio porque una niña le había pedido que le diera un cromo repetido de Wall-e que yo le había regalado; mi sobrina se negó y sin más, la otra niña cogió y se lo rompió. Yo no me meto en peleas de niños de preescolar, sería injusto y abusivo... pero hice algo totalmente antipedagógico y moralmente reprobable, pero muy satisfactorio para mi sobrina y para mí misma, indignada ante el abuso de su compañera... le pedí que me dijera dónde estaba la tal niña, me la señaló y nos acercamos. No, no la dije NADA, nada en absoluto. Simplemente saqué del bolsillo los sobres de cromos que le tocaba abrir ése día (compré la colección y la hacemos juntas, unos cuantos sobres cada día) y los abrimos allí, delante de la otra niña. Mi sobrina se puso muy contenta al encontrar de nuevo repetido, el cromo de marras, y lo levantó para que la otra lo viera, sin decir nada. Lógicamente, la otra se mosqueó, pero no se le ocurrió abrir la boca, consciente de que yo sabía lo sucedido...
Antes de eso, cuando mi sobrina tenía una chuchería, lo que fuese, le gustaba llevarla al colegio y jugar con ella con sus compañeros (un cochecito, un cubo de rubik...). Desde aquéllo, no quiere llevar nada, porque "los otros lo rompen". Y sinceramente, creo que hace bien. Como compartir, ya comparte con su hermana y su familia, que es con quien debe. El que da lo que tiene... se queda sin nada.
yo creo que para sobrevivir en la vida hay que mirar por uno mismo. los demasiado generosos son pasto del resto, que no tiene escrúpulos.
No hay que ser egoista pero tampoco hay que ser tonto