Corría un 24 de noviembre de 1996 cuando el Barça de Robson visitó San Mamés para medirse al Athltetic del carismático Luis Fernández. En aquel entonces, Jose Mourinho era el segundo entrenador del Barça, ayudante de Bobby Robson. Durante el partido, el técnico francés se las tuvo con el portugués, que salió del banquillo a recriminarle algo.
Se está demonizando a Mourinho cuando la culpa de todo la tiene Guardiola: no hace más que provocar en sus ruedas de prensa diciendo que el Real Madrid es un equipazo, que tiene buenísmos jugadores, etc.
Comentarios
Vaya culebrón, por favor que los lleven a
meneamesálvamedeluxe.Se está demonizando a Mourinho cuando la culpa de todo la tiene Guardiola: no hace más que provocar en sus ruedas de prensa diciendo que el Real Madrid es un equipazo, que tiene buenísmos jugadores, etc.