Los materiales necesarios son un hub USB, un microinterruptor que comunica si la puerta se abre hacia adentro o hacia afuera, un servomotor para desbloquear la apertura de la gatera, un servocontrolador, un lector de etiquetas RFID… y la puerta felina, claro. En un alarde de frankensteinismo (¿existe ese palabro?) el autor ha empleado como placa base una proveniente de una guitarra del “Guitar Hero”.
Y un gato, hace falta un gato.
Por cierto, lo que me llama la atención es que haya 1157 personas que sigan una cuenta de twitter que lo único que dice es que un gato sale o entra de casa. Locos, la gente está fatal
Comentarios
La madre que lo pario . ¿Lo verifica con una foto porque no se fía de que otros mininos le roben el collar?
Y un gato, hace falta un gato.
Por cierto, lo que me llama la atención es que haya 1157 personas que sigan una cuenta de twitter que lo único que dice es que un gato sale o entra de casa. Locos, la gente está fatal