El día del incidente, el protagonista de esta sorprendente historia comenzó a beber a eso de las nueve de la noche. Durante la cena, cuatro vasos de vino. Luego llegaron ocho martini y para terminar, media botella de vodka. Tambaleándose llegó a la sala de acceso restringido donde se encontraba el ancla. Entró, y ahí comenzó su show. Se puso unos guantes de trabajo que encontró en la zona, quitó el seguro y liberó las 18 toneladas de acero del ancla. Todo quedó grabado por las cámaras de seguridad del crucero.
Comentarios
Pues el juicio empezó hace un tiempecillo:
En juicio un pasajero que soltó el ancla de un crucero mientras navegaba
En juicio un pasajero que soltó el ancla de un cru...
cruceroadicto.comLa he intentado buscar dos veces antes de publicar, falta práctica