El camino hacia un mundo chinocentrista, al que se avanza sin prisa y sin pausa, con códigos invisibles a nuestro sistema de decodificación occidental, es una de las principales conclusiones de un trabajo monumental, pero en lenguaje de divulgación, preparado por dos periodistas españoles que viven en China, Juan Pablo Cardenal y Heriberto Araújo. El primero, residente en Hong Kong es corresponsal del diario El Economista. El coautor, con domicilio en Beijing, reporta a la agencia Notimex.
Comentarios
El típico articulo de topicazos sobre la china superinteligente. China es un estado dirigido por un estado fundamentado inicialmente en el comunismo (ideología occidental), con casos de corrupción por doquier como corresponde a su estructura de partido único, con un enorme avance económico logrado principalmente porque partieron de un charco de barro y por adoptar otra ideología occidental, el libre mercado occidental, ese sistema tan fallido que es el que da de comer a millones de chinos con sus importaciones. Se supone que es un sistema de gobierno superexitoso de la muerte, pero para sustentarse necesita ejecutar a miles de opositores políticos al año y poner filtros en internet, algo de lo que no deberíamos hablar demasiado porque eso de la libertad de expresión es algo que sólo vale para occidentales. Se dice que el concepto de estado-nación europeo no se les aplica, pero ellos sus líderes si que lo aplican cuando tienen conflictos separatistas y étnicos, o cuando exigen a Taiwan ser absorbida por China o quedarse con las famosas islitas por puro ego ultranacionalista. Y encima nos hablan de cómo va a dominar el mundo como si fuera algo bueno. Si no fuera porque tan sólo tienen la buena intención de ganar dinero vendiendo su libro, describiría a los que escriben estas cosas con palabras poco educadas.