Estados Unidos vive en un permanente estado de elecciones. Cuando el mandato de un presidente empieza a cuajar llegan las elecciones para renovar las Cámaras y la agenda presidencial se debe adaptar a una nueva realidad. Eso es lo que parece que ocurrirá en esta ocasión. Las elecciones de noviembre se postulan como un referéndum a la gestión de Obama.