Dar una patada a los problemas con la esperanza de que desaparezcan con el tiempo es una estrategia tan vieja como el mundo. Se siguió en el sector inmobiliario al inicio de la crisis , cuando muchas empresas cerraron planes de refinanciación con sus bancos. Lograban así un par de años para respirar con la esperanza de que el crash del ladrillo fuera más corto. Pero no ha sido así...
Mira tú por donde vamos a parecernos en algo a Japón: el mercado inmobiliario. Porque los banqueros no van a querer bajarse del burro, vamos a tener 10 añitos sin movimiento de precios. Pues nada: a comer ladrillito rico, que este es un país de mileuristas y parados.
Ahora nadie puede endeudarse y pagar por encima de sus posibilidades, así que ojalá obliguen a los bancos y cajas provisionar el 100% del valor del pufo (que ahí sí que les duele).
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Mira tú por donde vamos a parecernos en algo a Japón: el mercado inmobiliario. Porque los banqueros no van a querer bajarse del burro, vamos a tener 10 añitos sin movimiento de precios. Pues nada: a comer ladrillito rico, que este es un país de mileuristas y parados.
Ahora nadie puede endeudarse y pagar por encima de sus posibilidades, así que ojalá obliguen a los bancos y cajas provisionar el 100% del valor del pufo (que ahí sí que les duele).
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