Morirse cuesta como mínimo 2.000 euros entre los gastos del féretro, el tanatorio, las flores y los del propio enterramiento. Por eso, cada vez hay más gente que opta por donar su cuerpo a la ciencia y así ahorrarle ese desembolso a su familia. En cinco años las solicitudes han crecido un 60%. «Con la crisis económica han aumentado las personas que se interesan por esta opción. Nosotros nos hacemos cargo del coste económico», asevera Francisco Martínez Soriano, catedrático de Anatomía Humana de la Universitat de València.
Comentarios
Puestos a pudrirte bajo tierra en un carísimo e inútil cajón de madera, mucho mejor esto, la verdad.
Ya hacía falta, la verdad. Nosotros (65 personas) estuvimos 2 años con el mismo cuerpo.
#3 Joder, tenías un serio trastorno de personalidad múltiple.
#5 Grande
#3 Seguro que al final hasta os encariñásteis con él
Como dice #4 la conciencia social creo que también tiene que ver. A mi me parece genial.
Todavía existen esos seguros para pagarte el entierro????? hay que ver...
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actibva.comSupongo que eso y la mejora de la conciencia social son las cosas que provocan ese aumento de donaciones. En mi entorno, tengo ya varios amigos que se han hecho donantes de órganos para cuando mueran ya que han visto casos de cerca que ha sido necesario un trasplante para salvar la vida de otras personas.
)
Si dar mi cuerpo ayuda a salvar vidas en un futuro, tampoco hay nada de malo...(eso si, el hígado y los pulmones, en mi caso que los tiren directamente porque poco uso les darán
De aquí a un par de meses, como la cosa económica siga así, las facultades de medicina van a parecer los hospitales de las series de zombies....
#10 ¿Para cuando el "despertar"?
No hay mal que por bien no venga.
¿el mundo today?
Hum... pues yo había pensado en hacerme incinerar, porque lo del ataúd, romanticismo aparte, no me atrae gran cosa (diez años en un cajón, y luego te sacan y te dejan en un nicho otros diez, y luego no queda nada... qué pérdida de tiempo, con todos mis respetos, mejor acabar del todo de una vez. Una pasada por la tostadora, y listos.), pero la opción de donarse a la ciencia, tampoco está mal pensada...
A fin de cuentas, yo, el día que la palme, me gustaría que mis amigotes o mis familiares se fuesen de comilona en mi honor, que cuenten anécdotas para recordarme, y que suene el Highway to Hell (y por favor, que alguien imite a Homer "¡Ouh, no hay cerveza! ¡AH! ¡La barbacoa lleva piña!"), el Ave Satani, y que canten la canción fúnebre que cantaron los hermanos Marx en El hotel de los líos: "Éeeesteeeee.... es nueeeeestro adióooooos... al amigo que se maaarchaaaaaaaaaaaaa...."
El recordar a un ser querido, se hace con el corazón, no hay necesidad de una lápida... Mi abuelito estuvo en una tumba de lo más humilde en el Cementerio de Fuencarral, pero a mí no me hacía falta que me llevasen allí los domingos para recordarle y quererle (y saber que el abuelo que se había ido, había sido el que no era. Debió irse el otro). Si hubiésemos donado su cuerpo a la ciencia, yo le hubiese seguido queriendo igual y sintiendo pena por su ausencia.
Pero la gente no tiene seguro "de los muertos"? No entiendo nada, nada esta noticia. Yo pago un seguro que cubre el entierro en nicho como la incineración y os puedo asegurar que la familia no tiene que pagar nada, excepto si es quiere un mega entierro de lujo.
#7 ¿Y quien no puede pagar ese seguro?