Según revela el “Observer”, ese largo seguimiento –explicable porque la iglesia romana carece de influencia en Gran Bretaña- remite a otro ”banquero de Dios”, el extinto cardenal norteamericano de origen lituano Paul Marcinkus. Pero, como su amigo Karol Wojtyla, se llevó muchos secretos a la tumba, además de la suerte de Juan Pablo I. Cientos de millones descubiertos en Bahamas eran de Roberto Calvi, “el banquero de Dios”, colgado por la Mafia bajo un puente en Londres
Comentarios
Bueno, sobre Juan Pablo I, pues no es la primera vez que un papa estorbaba. Este especialmente era peligroso, porque hablaba de actos contra natura como repartir el dinero y vender propiedades de la iglesia, centrarse en los pobres en vez de en los ricos... Cosas y actitudes extrañas de las que la iglesia no quiere oir. Así mismo, Clemente VII por unos motivos y Alejandro VII (conocido tambien por Cesar Borgia) por otros muy distintos también fueron... eeh... apartados de sus funciones por gente que consideraba más interesantes sus propósitos. Y la lavadora de dinero negro de la mafia, a través del IOPR que tan bien dirigía marcinkus era un motivo muy lucrativo.