Tenemos toda la campaña electoral para emplear la etiqueta #novotoprotaurinos para defender las candidaturas que apoyamos, pero también para inundar de mensajes las cuentas de Twitter de los candidatos protauromaquia. Las redes sociales son bidireccionales, y los políticos no tienen derecho de apropiarse de sistemas de comunicación para su propio interés propagandístico. Existen muchas alternativas políticas que no defienden a la industria taurina, frente al programa electoral del Partido Popular o las acciones del PSOE durante la legislatura