Hace 9 años | Por Ripio a yorokobu.es
Publicado hace 9 años por Ripio a yorokobu.es

Muchos de los clichés que acabaron conformando la iconografía gay empezaron a tomar forma en una polvorienta iglesia baptista de Stanley, un pueblecito de la costa este de EE UU. Fue en 1933 cuando la señora Quaintance telefoneó a su hijo para convencerle de que pintara un mural en el desvencijado templo.