Hace 8 años | Por salvagoxo a cnnespanol.cnn.com
Publicado hace 8 años por salvagoxo a cnnespanol.cnn.com

El colombiano Luis Fernando Arango dice que el 6 de marzo de 2013 recibió la llamada de los dueños de la Funeraria Vallés de Venezuela. Le pedían el favor de prestarles un coche fúnebre que permitiera que los asistentes al sepelio del presidente Hugo Chávez pudieran ver el ataúd durante el recorrido por Caracas.