Entró en la Guardia Civil casi de rebote y ante el estupor de la familia: “Mi padre, alucinó: Antonio Martín Castillero, gitano y... ¡guardia civil! No lo creía”. Pero esa doble condición le sirvió para convertirse rápidamente en investigador de la la unidad de Policía Judicial del cuerpo: podía infiltrarse donde fuera y llegar adonde nadie llegaba.
Esto eran dos gitanos que se metieron a guardia civiles. Haciendo la ronda, se toparon con otros dos gitanos que estaban robando, y uno de los ladrones gritó "¡la guardia civil, la guardia civil!". Y salieron huyendo los cuatro.
Comentarios
ha conseguido todas sus metas
Del 2010. Pura actualidad! #0
Esto eran dos gitanos que se metieron a guardia civiles. Haciendo la ronda, se toparon con otros dos gitanos que estaban robando, y uno de los ladrones gritó "¡la guardia civil, la guardia civil!". Y salieron huyendo los cuatro.
Meneo por el nick del que ha traído el meneo
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#4 un clásico pero muchas gracias