Meghan Daum es ensayista y periodista. Entre sus libros está The problem with everything: my journey through the new culture wars, un ensayo brillante que combina el análisis, la autobiografía y la polémica, y que estudia asuntos como el feminismo de cuarta ola, las diferencias de visión entre generaciones, el ascenso de la sensibilidad woke y la cultura de la cancelación.
Pero la jerga en torno a la “masculinidad tóxica” dice que, de algún modo muchos –si no la mayoría– de los hombres están programados por una sociedad sexista para tratar a las mujeres mal y que las mujeres, por otro lado, carecen por defecto de culpa. Y sencillamente las cosas no son así. De hecho, pensar eso trivializa a las mujeres. Es sexista.
para combatir las políticas de Trump, tenemos que poder hablar de qué políticas alternativas pueden ser mejores. Pero no podemos ni llegar allí. Esto es solo un ejemplo de los incontables temas que han quedado prohibidos en la izquierda porque la gente ya no puede gestionar los matices.
Aquellos de nosotros que nos preocupamos por los matices deberíamos seguir teniendo conversaciones matizadas, aunque eso nos condene al ostracismo entre nuestros pares o nos acarree insultos en las redes sociales.
Estas frases, que vienen de una persona de izquierdas, les pueden venir muy bien a aquellos meneantes de izquierdas tan asiduos a la censura.
Comentarios
La verdad es que es una entrevista muy sensata. Mis dieces
Pero la jerga en torno a la “masculinidad tóxica” dice que, de algún modo muchos –si no la mayoría– de los hombres están programados por una sociedad sexista para tratar a las mujeres mal y que las mujeres, por otro lado, carecen por defecto de culpa. Y sencillamente las cosas no son así. De hecho, pensar eso trivializa a las mujeres. Es sexista.
para combatir las políticas de Trump, tenemos que poder hablar de qué políticas alternativas pueden ser mejores. Pero no podemos ni llegar allí. Esto es solo un ejemplo de los incontables temas que han quedado prohibidos en la izquierda porque la gente ya no puede gestionar los matices.
Aquellos de nosotros que nos preocupamos por los matices deberíamos seguir teniendo conversaciones matizadas, aunque eso nos condene al ostracismo entre nuestros pares o nos acarree insultos en las redes sociales.
Estas frases, que vienen de una persona de izquierdas, les pueden venir muy bien a aquellos meneantes de izquierdas tan asiduos a la censura.
#4 Yo creo que la frase "la gente ya no puede gestionar los matices" resume muy bien lo que se ve muchas veces en el debate político.
¿Cobardes y poco hombres, quizá?
De lectura obligatoria. Muy bueno.
Es exactamente lo que le hace falta a este sitio.
Vamos, todo se resume en la Sociedad del postureo.
Saludos.