"Todas las personas nacemos príncipes y princesas hasta que nuestros padres nos convierten en ranas”. Bajo este sugerente concepto, Steiner y muchos otros han investigado los efectos que ejerce sobre el ser humano crecer y vivir en una abundancia o escasez de estos signos de reconocimiento (caricias).
Comentarios
Menos a la duquesa de palma que lo hizo su hermano.
Muy cierto,mucho.
Cariños