Hace 8 años | Por --325495-- a magnet.xataka.com
Publicado hace 8 años por --325495-- a magnet.xataka.com

El crítico cultural es quizá la categoría menos prestigiosa dentro del periodismo, a su vez, la profesión menos prestigiosa de la sociedad. Es una tarea en ocasiones ardua, especialmente cuando los críticos se enfrentan al insoslayable juicio del paso del tiempo. Décadas después, vistas en perspectiva, muchas críticas terminan siendo víctimas de su contemporaneidad, incapaces de comprender obras cuya proyección histórica las ha elevado a un espacio privilegiado dentro su arte.

Comentarios

anxosan

Mi padre, después de que Julio Iglesias dejase el Real Madrid (por un accidente) para dedicarse a la música, fue a un concierto suyo y su veredicto fue algo así:
"Pobre chaval, ni tiene voz, ni sabe cantar ni moverse... este no llegará a nada en la música"

Como veis, procedo de una estirpe de visionarios.

Delapluma

#2 Lo peor es que tu padre tenía más razón que un santo.

Hace relativamente poco tiempo, se me ocurrió ver Foxcatcher. Me habían dicho maravillas de ella, y allí me planté yo a verla. En un principio me pareció de narración calmada. Poco más tarde, me pareció lenta. Y un rato después, me pareció soberamente aburrida. Me costó muchísimo terminarla, y sólo a base de un ejercicio de testarudez cinéfila lo conseguí. Desde "Monstruñoso" que no agradecía tanto que terminase una película. Leyendo críticas por internet que la ponen de extraordinaria e injustamente infravalorada, me dan ganas de verla otra vez, a ver si es que realmente me he perdido algo y estoy ante la nueva Ben-Hur del siglo XXI, pero qué queréis que os diga: para mí resultó una pildorón, y no tanto por la historia en sí, sino por la manera en que es narrada. Digo esto porque la crítica es un campo traicionero y muy amplio, y uno tiene que recordar un par de cosas:

a) su gusto, no es palabra y ley. Pero el gusto de los demás, tampoco lo es.

b) un taquillazo, no implica forzosamente que nos encontremos ante una buena peli, ni un fracaso en taquilla implica que la peli sea mala.

Hará un par de años, me tocó escribir críticas de algunos libros de moda para adolescentes, estilo los juegos del hambre o criaturas... (he olvidado el resto del título, pero sé que no era "celestiales", porque eso es una peli), o ciudad de huesos. Objetivamente hablando, sólo salvaría los juegos del hambre, y por que, dentro de un orden, es medio entretenida, pero yo no le encontré calidad literaria ninguna. Las otras dos, lo más suave que pensé fue cosas como "y pensar que han muerto árboles para imprimir esto...". Las puse a caldo, y tuve que enfrentarme a varias adoratrices de los citados libros que me significaron con muy poca sutileza su desacuerdo con mi crítica. Les expliqué que tenían que hacerse a la idea de que, porque algo les guste muchísimo a ellas, no le va a gustar a todo el mundo. Que darse cuenta que existen otras ideas radicalmente distintas a las nuestras, aceptarlo y saber restarle importancia, forma parte del proceso del crecimiento y de la madurez. Que yo adoraba cosas, libros, películas y música que ellas encontrarían detestables o repugnantes, y eran libres de criticarlo, pero eso no cambiaría mi modo de pensar... yo tenía un trabajo que hacer, que consistía en leer un libro, analizarlo y criticarlo, dando mi opinión acerca del mismo y justificando esa opinión, y eso era lo que había hecho. Y si un libro estaba plagado de errores, de deus ex machina, de personajes planos de "mi primera cartilla" y carecía de calidad, la culpa no era mía. Yo me limitaba a señalarlo.

Dentro quizá de veinte años, alguien podrá decir que esas novelas son de culto. Que formaron a una generación de jóvenes lectores. Que los chicos de entonces ya no leen, pero que ellos tuvieron a tal personaje que les abrió las puertas de la lectura. Y alguien sacará mi ácida crítica y se reirá de ella, como yo me reí de la novela. Me dirán que vaya ojo clínico. Me dirán que nunca debí dejar de leer Mortadelo, que no entendía nada más que eso. Lo asumo. Y lo que haré en ese caso, será pegar una buena chupada a mi cachimba y pasar la página de mi Drácula mientras murmuro "pobres ignorantes".

Un buen crítico es inmune a las críticas.

ikipol
D

Con las críticas de Boyero se puede hacer una antología de artículos como este.

p

Como si el éxito ahora fuese sinónimo de calidad. Seguro que hay muchos que lo creen.

i

La categoría menos prestigiosa de periodísta es el becario de los cafés seguido muy de cerca del resto de mercenarios que cambian noticias acríticas por un puesto de trabajo padefo.