Lejos de ser un caso aislado, si echamos la vista atrás encontramos una larga tradición de artistas a los que el mismísimo demonio debía de estar susurrándoles al oído mientras pintaban, así que ahí va una breve selección, voten o añadan algún otro ejemplo si lo desean.
Comentarios
El Cristo de Borja
Son asquerosas todas
#3 Jajaja.
Es una blasfemia que el retratista no haya sacado lo más egregio de nuestro presidente más internacional: los abdominales.
#4 siendo un retrato como no se los pinte en la frente
#6 Hombre, un retrato puede ser de cuerpo entero...
IN ICTO OCULI.
#5 Muy bueno... memento mori.
Carpe diem, hora adest vespertina.
Pensaba que era un artículo serio hasta que he visto que era un poco menos mierder que los de Vice.