Publicado hace 5 años por B... a mirinconcatartico.wordpress.com

"El acercarse a la realidad, a la verdad, a veces hay que pagarlo con dolor, y es ese miedo al dolor el que nos hace mirar hacia otra parte como si fuésemos aquellos niños que creían en los reyes magos (...) de adultos nos erigimos muros a nuestro alrededor para que nadie nos “agreda” con verdades, de manera que nos cabreamos o racionalizamos o usamos cualquier mecanismo de defensa para no tener que pensar que a lo mejor no estamos en lo cierto".

Comentarios

D

Lo que está claro es que creemos lo que nos queremos creer o en lo que tenemos necesidad de creer.
Conozco muy, muy poca gente que, realmente, se ponga en el puesto de otro y que juzgue las situaciones con una cierta objetividad. Y, desde luego, a poquísima gente con un mínimo de empatía.

D

Falta un motivo: que cuando nos hemos dejado engañar y hemos gastado un buen dinero en por ejemplo, terapias magufas que no sirven para nada, aunque nos demos cuenta nadie va a decir: "sí, soy gilipollas", sino que defenderá esas terapias con su vida con tal de no quedar como idiota.
Cuesta darse cuenta que así se hace aún más el ridículo.

vomisa

Porque es más sencillo creer en algo falso que razonar hasta algo cierto.

t

De hecho la fe en sí tiene bastante peligro. Si ante algo que no conocemos la reacción es "pues yo creo que ha sido Dios", nos contentamos y nos quedamos igual. En cambio, si pensamos más bien "qué cosa más rara, voy a ver si descubro qué está pasando" es cuando descubrimos cosas y evolucionamos.

Por eso hay tanto rifirrafe entre ciencia y religión, porque, aunque se puedan compatibilizar, hay que hacerlo en pequeñas dosis, y siempre enfocándolo bien para que la fe en que todo lo hace una deidad superior no nos anule la curiosidad científica.