Publicado hace 4 años por --526411-- a inframundofargov.wordpress.com

A finales del s. XIX, la moderna ciudad de París marcaba muchas de las tendencias del momento y una de ellas era el interés por los sobrenatural y el ocultismo. Las ciencias esotéricas estaban en auge, sobre todo entre los miembros de las clases altas, gracias a los trabajos de autores como Papus o Eliphas Lévi. Así que se establecieron en la capital francesa varios cabarets en los que se representaban espectáculos relacionados con la muerte, el espiritismo y lo macabro.