Con la ayuda de bolas de acero, investigadores del University College de Londres han molido agua congelada a –200 °C hasta conseguir una forma amorfa desconocida, con una densidad media muy cercana a la del agua líquida. Un proceso parecido podría ocurrir en las lunas heladas del sistema solar.
Comentarios
Pobre hielo, ahí faltándole al respeto. Yo lo llamaría "Hielo con diversidad mórfica" para ser más inclusivos
Interesante