Una nueva investigación muestra que aunque no ganes en la lotería genética, no importa si ya lo has hecho en la socioeconómica. ¿Cómo influyen nuestros genes en nuestro éxito? La pregunta del millón de dólares es, por lo tanto, en una sociedad meritocrática, ¿qué tiene más ventajas, nacer en una familia con un alto nivel socioeconómico o con unas capacidades innatas muy elevadas? Al fin y al cabo, no podemos decidir ninguna de las dos cosas.
Comentarios
Falso dilema. Deja fuera otras cuestiones: la educación en valores de la familia, cultura del esfuerzo, círculo social, etc.
Lo que siempre digo: el dinero consigue el mérito.
Por otra parte, el que es pobre es porque quiere votar capitalismo, monarquía y pobreza, con sus votos y con su prole.
Por cierto, el libre mercado no va de genética, va de libre concurrencia, es decir, de cambiar de profesión cuando la tuya se vuelve menos rentable. El libre mercado está perfectamente cómodo presuponiendo una igualdad genética.