Hace 7 años | Por pablisako a cadenaser.com
Publicado hace 7 años por pablisako a cadenaser.com

Nieves Concostrina nos explica que el 16 de mayo de 1847 este doctor húngaro obligó a sus subordinados a lavarse las manos con agua clorada antes de atender cada parto. Ellos no estaban por la labor y se quejaron al jefe médico del Hospital General de Viena. Semmelweis fue despedido, pero no cesó en su empeño de demostrar la necesidad de la asepsia, hasta morir por la causa.

Comentarios

pablisako

“Toda verdad atraviesa tres fases: primero, es ridiculizada; segundo, recibe violenta oposición; tercero, es aceptada como algo evidente”
― Arthur Schopenhauer