Corre como la pólvora por Internet una información lanzada en Twitter por Fonsi Loaiza (y que ha sido Rafael Del Pino, presidente de Ferrovial con un patrimonio de 4.000M€, recibe el bono social eléctrico para consumidores vulnerables
) en la que se afirma que Rafael del Pino Calvo Sotelo, presidente de Ferrovial, cobra el "bono social eléctrico para consumidores vulnerables". Como parece que la gente está demasiado ocupada para leer las fuentes, y que fact-checkers como Maldita y Newtral están más ocupados analizando montajes de WhatsApp, me he permitido demostrar por qué esta afirmación es un bulo.Veamos primero el tuit:
En el tuit, además de la afirmación, se enlaza la fuente, que en este caso es una noticia de El Confidencial, bajo muro de pago. Sin suscripción sólo se puede acceder al primer fragmento de la noticia, pero utilizando el "truco" del modo lectura, podemos leer todo el contenido.
En él, lo único que se menciona sobre Rafael del Pino es lo siguiente:
Como se puede ver, no se menciona ningún tipo de "bono social eléctrico para familias vulnerables", sino otro tipo de subvención relacionada con la "adaptación de líneas de alta tensión" dentro de un plan para "proteger de la mortalidad de la avifauna por electrocución".
¿De qué estamos hablando entonces? Como el registro de la Intervención General de la Administración Pública es, precisamente, público, vamos a comprobarlo:
Efectivamente, la información devuelta es la misma que recoge El Confidencial, al igual que InfoLibre en esta otra noticia, también en muro de pago, pero que recoge básicamente la misma información:
Dicha información, una vez más, es pública, tal como muestra el Sistema Nacional de Publicidad de Subvenciones y Ayudas Públicas.
Podemos afirmar, pues, tres cosas:
- Que no hay pruebas de que Rafael del Pino esté cobrando el "bono social eléctrico", sino otra subvención cuyas bases nada tienen que ver con la condición de vulnerabilidad o familia numerosa, y cuya finalidad está muy alejada del propio consumo de electricidad.
- Que Fonsi Loaiza está manipulando dicha información y mostrándola como que Rafael del Pino está percibiendo un bono social eléctrico.
¿Debería sorprendernos? No, porque la cuenta de Twitter de Fonsi Loaiza, cuya breve carrera política (o intento de ella) está plagada de sombras (El Plural - El "Pequeño Nicolás de Podemos"; Cadena Ser - Podemos desautoriza a Fonsi Loaiza) está trufada de bulos, manipulaciones, plagios y salidas de contexto.
Analicemos otro caso, concretamente del día 20 de marzo de 2023. Fonsi Loaiza tuitea lo siguiente:
El Palmar es una zona especialmente "golosa" para los especuladores y los empresarios del turismo. Los vecinos están hartos. Pero, ¿qué relación tiene ésto con el marido de Ana Rosa?
Primero veamos una entrada de Facebook de hace varias semanas que, si has leído la imagen anterior, te recordará a algo:
El enlace de La Voz del Sur en dicha entrada no menciona a Juan Muñoz (simple inversor), sino a distintos políticos que han dado luz verde al proyecto. Independientemente de ello, y tecnicismos a parte, sí es cierto que Juan Muñoz está involucrado en ello, como inversor del Grupo Millenium.
Un momento. Entonces, ¿las protestas?
Pues las protestas con las que el señor Loaiza ilustra la queja de los vecinos contra el proyecto del marido de Ana Rosa Quintana son en realidad de otro proyecto diferente, de diferente grupo y con distintos inversores, tal como se puede ver en este artículo de Ecologistas en Acción.
Como siempre digo, tengan mucho cuidado con estos "twitteriodistas" de dudosa reputación, cuya estrategia de marketing se basa en hacer mucho ruido en redes sociales a través de la manipulación y la mentira, normalmente para vender su producto o simplemente saciar su ego.
Comentarios
Tiene mi voto y mi agradecimiento por el esfuerzo mostrado en buscar fuentes primarias para combatir la propaganda con datos....
#3 Lo suscribo.
Bien analizado. Esto no llegará a portada. Puedo ver el futuro.
#6 Pues tu razón vale un meneo. #0
Ya me extrañaría que estuviese cobrando un bono social eléctrico.
El motivo, con el límite de potencia para el bono social no se cubre ni de coña las necesidades energéticas de su domicilio en el Viso.
https://www.vanitatis.elconfidencial.com/noticias/2016-06-17/estas-son-las-fastuosas-propiedades-en-litigio-en-el-divorcio-millonario-de-rafael-del-pino-y-astrid-gil-casares_1216817/
Me pregunto si estos bulos y manipulaciones son de esos que "debilitan la democracia" y por los que tenemos que indignarnos, o como son "bulos de izquierdas" pues nada, a tragar y dejar que espabilados como el Fonsi este nos los cuelen doblados.
#1 Es que estos bulos tienen las patas muy cortas, porque sólo son spameados residualmente por las redes sociales.
Los bulos de la derecha cuentan con toda una plataforma de radio-televisión para asegurarse de que llegan a todos lados.
Yo de este bulo ni me había enterado. Pero en los tiempos en que aún escuchaba a Alsina, cuando aún me la había colado con que era periodista, en vez de un miserable carroñero amancebado, pues me enteraba hasta de si Pablo Iglesias comía fabada asturiana el día antes de ir al congreso sólo por lanzarle flatulencias a Casado.
Así que ... es relativamente normal que esto no llegue a portada. Es un bulo de patas cortas. Cutre y de poca difusión.
#4 Entiendo tu reflexión, que por cierto me parece muy buena y razonada, pero no estoy completamente de acuerdo con ella. Intentaré explicar mis razones:
Las redes sociales hoy día han desbancado a los medios de comunicación clásicos en según que franjas de edad, de modo que el target de unos y otros es sustancialmente diferente. Mientras que Ana Rosa y programas similares llegan a amas de casa de edad avanzada y a jubiletas fundamentalmente, tik tok, instagram, twitter etc. llegan fundamentalmente a los jóvenes, que no consumen los primeros.
De modo que no comparto el que hoy día la prensa/medios clásicos llegan más a todo el mundo que las redes sociales. Cada uno tiene su target, y el de las redes sociales es eminentemente joven (y por joven estoy incluyendo fácilmente a la gente de la franja de 40 años para abajo). Esa gente (y esta es una apreciación personal) difícilmente consumirán a Ana Rosa, Alsina, etc.