Unos resultados electorales que difieren mucho de las encuestas a pie de urna, un ministro que utiliza los aparatos del Estado con fines políticos, una empresa que después de verse envuelta en varios escándalos, incluido La Púnica y otros de fraude electoral, es escogida para gestionar unos comicios en los que la manipulación es casi nula. ¿Existe entonces posibilidad de fraude electoral? ¿Debió el ministro dimitir al revelarse las escuchas? ¿Debió ser Indra contratada después de verse envuelta en tantos escándalos?
Comentarios
Los cospiranoicos hacen dudar a cualquiera
Luego hablan de chemtrails o algo interesante ?