Hace 1 año | Por blodhemn a xataka.com
Publicado hace 1 año por blodhemn a xataka.com

La lluvia parecía una buena noticia hasta que se encontró de frente con la mayor cantidad de terreno quemado en 30 años. A medida que las lluvias alcanzan las grandes extensiones de terreno que se ha quemado durante este verano en el oeste peninsular, los ríos se van llenando de una mezcla de ceniza y agua que, por su carácter hidrofóbico y oscuro, se conoce en los últimos años como "chapapote forestal".