Hace 10 meses | Por MAVERISCH a principal.cat
Publicado hace 10 meses por MAVERISCH a principal.cat

Los trabajadores de una empresa del Grupo Konecta BTO, un call center de Madrid, vivieron la semana pasada una escena surrealista más propia de una película de terror. Los sindicatos denuncian que una empleada, Inmaculada, murió repentinamente y que la dirección obligó a la plantilla a seguir cogiendo el teléfono con el cadáver todavía presente.