El viento y el calor están complicando las labores de extinción del incendio declarado esta mañana en el barranco de Chajaña, en el municipio tinerfeño de Arico, que continúa sin ser controlado y afecta a unas 300 hectáreas. Cuatro helicópteros y un hidroavión descargan agua sobre el incendio en el que también trabajan más de cien personas, entre brigadas forestales, bomberos, agentes de Medio Ambiente y Protección civil. El portavoz del Gobierno de Canarias, Julio Pérez, ha declarado que la situación no es positiva